El método de las «parejas obvias» sigue el mismo principio de resolución que el método de los «sencillos obvios»: hay que escribir los números candidatos que coinciden en todas las casillas y, luego, mirar los bloques de 3x3 que tienen casillas con dos números candidatos idénticos.
Veamos un ejemplo para que quede más claro. En el bloque seleccionado, todas las celdas contienen números candidatos y hay tres celdas con dígitos repetidos:
- 2 y 8 (arriba a la izquierda);
- 2 y 8 (arriba a la derecha);
- 1, 2 y 8 (abajo a la izquierda);
Las dos casillas superiores solo pueden contener el 2 o el 8; el resto de los números no (según las reglas del sudoku). Estas serán nuestras «parejas obvias». Solo nos queda entender en qué celda estará el 2 y en qué celda estará el 8. Nos fijamos en la celda inferior izquierda. Hay números candidatos del 1 al 8. Ya hemos averiguado que el 2 y el 8 estarán en las celdas superiores, así que borramos los números 2 y 8 de la celda inferior izquierda, dejando el «sencillos obvios» — 1. Eso es lo que escribimos.
El método de «parejas obvias» para resolver sudokus es interesante porque te permite rellenar las celdas rápidamente, con un riesgo mínimo de error.